sábado, 4 de julio de 2015

Los servicios, la exclusión y la pobreza, ejes de Lambán


El socialista anuncia la creación de una renta social básica y un plan inclusivo. El candidato a presidente reformará las políticas de empleo



El socialista anuncia la creación de una renta social básica y un plan inclusivo. El candidato a presidente reformará las políticas de empleo.


Hace unas semanas comentó Javier Lambán a su círculo más cercano que había leído la encíclica del Papa Francisco y que no solo le había sorprendido, sino que le había gustado. Ayer, el próximo presidente de la comunidad lo citó en dos ocasiones en su discurso de investidura. De las palabras de Bergoglio puede extraerse el espíritu de una alocución en la que el socialista había trabajado una semana: el valor de la estabilidad, la unidad y la paz social. En un tono elevado y profundo, hizo los guiños esperados a los grupos que lo llevarán al Pignatelli --CHA, Podemos e IU-- y marcó sus prioridades, la lucha contra la pobreza, la exclusión y la recuperación de los servicios públicos.
 



El discurso de investidura, que hoy será contestado por el resto de grupos, tuvo el sello Lambán. El socialista rompió con la tradición tecnócrata y enumerativa --más propia de Marcelino Iglesias y Luisa Fernanda Rudi--, y abrazó un estilo intelectual, trufado de citas, con ideología aderezada de anuncios genéricos. El socialista se concentró en los servicios sociales, siguiendo la línea política del PSOE en los últimos años; la crítica, al fin y al cabo, al Ejecutivo del PP.
 
Lambán comenzó con la sanidad: se comprometió a la reducción de las listas de espera; a construir un hospital de Alcañiz público, o a agilizar las obras del de Teruel. En educación existe el compromiso firme de la izquierda de frenar la aplicación de la LOMCE en Aragón, así que no podía faltar una alusión a este gran acuerdo.
 
 

Con las políticas sociales llegaron los primeros anuncios concretos: la creación de una renta social básica y una ley de medidas extraordinarias y coyunturales para el fomento de la inclusión. Sin olvidar la necesidad de "actualizar la aplicación de la ley de dependencia". Estas serán las grandes prioridades del nuevo Gobierno del PSOE, "aunque sea a costa de reducir o posponer otras partidas de gasto por importantes que sean", destacó.


El empleo ocupó la parte central del discurso, que duró una hora y diez minutos. Propuso una "reforma en profundidad de los estímulos, ayudas y subvenciones" destinados a la creación y mantenimiento de los puestos de trabajo. Los recursos públicos, dijo, deben concentrarse en los colectivos con mayores dificultades de inserción laboral. Apostó por sectores como la innovación, para la que anunció un programa específico y fundamentado en la Universidad de Zaragoza. El candidato socialista, que hoy será investido presidente con los votos de su partido, CHA, IU y Podemos, habló también de regeneración democrática, con la creación de nuevos cauces de participación; de la reforma del reglamento de las Cortes y de la creación de una oficina de lucha contra la corrupción.




Lambán fue reconocible en todo su discurso. De ahí que no pudiese faltar una reivindicación del municipalismo, como "auténtico espacio real de la socialización y de la democracia". Dijo que abordará el reparto competencial entre la comunidad autónoma y los ayuntamientos y consideró las comarcas y las diputaciones "contigenciales". Apostó por simplificarlas y despolitizarlas.

El Periódico de Aragón.









 

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