Rehenes del bus

ARTICULO

 

Margarita Barbáchano

Así llevamos ya más de tres meses de huelga en el transporte público de Zaragoza y no pasa nada. Parece que solo existieran ellos, los que se han plantado ante una empresa depredadora, teniendo de rehenes a los miles de usuarios del autobús. Una jugada diseñada a la perfección que les está saliendo bien, y que tiene en vilo a muchos "otros" trabajadores, usuarios y vecinos de los barrios de la quinta ciudad de España. El comité de empresa, que solo mira por lo suyo, por esos porcentajes cansinos de subida salarial, utiliza a los ciudadanos de manera egoísta y descarada. Les importamos un bledo, nos desprecian y se ríen de nosotros en nuestras propias narices. Una cosa es el derecho a la huelga (que no voy a discutir), y otra es pasarse, poner en jaque mate al Ayuntamiento de Zaragoza, y humillar a los vecinos todos los días con horarios inhumanos.

 

Nos han amargado las navidades, nos están haciendo pasar mucho frío y soportar el cierzo terrible de esta ciudad en las paradas con esperas de más de 60 minutos. Y eso, si tienen la amabilidad de avisar en los paneles informativos, porque son tan salvajes que la mayor parte de las veces desconectan la aplicación y a joderse... El que puede pagarlo se coge un taxi, pero ya llevamos mucho tiempo gastando dinero en taxis como para hacerlo dos o tres veces al día. ¿Quién nos paga los taxis? ¿Quién nos reintegra el dinero invertido en un bonobús tras otro? ¿Quién nos quita el enfado que llevamos, el silencio guardado ante este abuso de unos pocos sobre los derechos de otros muchos? ¿Quién nos devuelve el tiempo perdido de nuestras vidas? Lo cuento para que las autoridades locales se enteren: los usuarios del bus con esta huelga eterna tenemos que organizar nuestra vida saliendo de casa dos horas antes para pillar el bus media hora antes de que estos señores comiencen su huelga. La vuelta a casa al caer la noche, es todavía más dramática y más cara. ¿Por qué tenemos que acoplar nuestra vida al antojo de unos cuantos conductores del transporte público? Si tienen problemas, ya nos hemos enterado. Los demás también los tenemos, y los que no ganan su sueldo, todavía tienen más problemas. Y si el tema está tan enrarecido que se ha convertido en un duelo entre los trabajadores de AUZSA y la concesionaria, pues que intervenga la autoridad pública y les quite las armas de una vez.

 

Luego está su chulería. Me refiero a esa chulería que exhiben algunos conductores, sabedores de que el poder está en sus manos. Resulta insufrible y peligroso la velocidad con que manejan el bus, los frenazos a mala leche en las paradas, cómo amontonan adrede en los coches a la gente en horarios críticos para ellos. Y cómo pasan a toda velocidad a cocheras viendo las paradas atestadas de personal. Sin olvidar de que hasta hace poco nos hacían bajar a veces en medio de la nada para cumplir con su batalla personal.

 

Menos mal que la FABZ ha reaccionado, aunque tarde, y se pone del lado de los usuarios del bus urbano. Conviene tenerlo claro.

 

Periodista y escritora.

 

El Periódico de Aragón.